martes, 9 de junio de 2015

AZAR

Pintura de Richard S. Johnson. American painter, Chicago - Illinois, 1953. Impresionismo.
Artista ganador del Premio Artemisa 1997 , entre otros.


Azar

Un azar golondrina
inesperado pasa.
Hay muchos que lo esperan
dicen las hojas – .
Pero yo no lo espero.
Algunos azares se fueron al norte,
luego vinieron otros
que buscaban agua,
tierra sin penumbras.

Así es la inventiva del azar fulgurante,
te envuelve y deslumbra en su antojo volátil,
la llave de su faro nunca abrirá tu cárcel.

Un azar nuevo vino a buscarme,
recorrimos lugares esperando fortuna,
él quería una palmera con dátiles maduros,
yo quería un alero donde mirar las aves.

Llegamos casi al borde de un nacimiento,
allí donde comienza el desequilibrio...
De improviso se fue, como imprevisto vino.

Azares prodigiosos, azares clandestinos...
En la tarde voló un azar sobre el trigo,
las espigas le trenzaron versos inolvidables.

🍀🍀🍀

Clarisa Tomás Campa.© All Rights Reserved.


Gracias, lectores. 🙏
Merci beaucoup à tous!

domingo, 22 de junio de 2014

MARIONETAS

Imagen: "Cuerdas". Corto ganador del Premio Goya 2014 al "Mejor cortometraje de animación español".
Escrito y dirigido por Pedro Solís García.

Fuente: http://www.rtve.es/alacarta/videos/premios-goya/trailer-del-corto-cuerdas/2355441/

La nostalgia.
Las astillas de la sangre,
el morado de la ojera.
La entereza.
La esperanza como un mito,
la caída de los sueños,
el jardín de los fracasos.
El camino.
El misterio
de morir tan poco a poco;
de vivir tan nada a nada,
sorbo a sorbo
en la ignorancia.
Siempre presos
de los pasos,
¡corre, corre!;
¡para, para!.
Y esa espalda tan cansada.
La balanza.
El constante latigazo,
ese trueno que amenaza
con matarnos;
esa calle tan pisada,
ese rostro que no vemos.
El anhelo.
El inútil tintineo
de la poca luz que asoma,
la pregunta sin respuesta.
La ceguera.
Los azules eclipsados,
mares, cielos.
La inclemencia.
Lo que esperas y no llega.
Lo que asusta, el abandono.
El temor arrinconado,
marionetas tiritando
entre las cuerdas.
¡Tierra, tierra!

Del libro: "Entre dos tierras". Edit. Punto Rojo. nov. 2015 © All Rights Reserved.



domingo, 9 de marzo de 2014

AGRADECIDOS

Imagen: "Idilio" de Joaquín Sorolla. (Museo Sorolla, Valencia).


Agradecidos

De los amores
que alertaron nuestro impulso
dormido.
Agradecidos.

De los amores
que parecían mansos
y se convirtieron en fieras;
que desataron el fuego
y quemaron nuestro único trigo.
Agradecidos.

De los amores
que iniciaron una ruta errada
que jamás quisieron andar,
porque el camino añorado
iba en sentido contrario.
Y, nos dolimos...
Agradecidos.

De los amores
que robaron nuestra alegría
y nos hicieron presos;
y nos arrinconaron y tiraron al vacío
y así, sobrevivimos...
Agradecidos.

De los amores
que bebieron de nuestra amargura,
y limpiaron nuestra torpeza;
que curaron otros amores viejos
y nunca pidieron cuentas.
Agradecidos.

De los amores
que encontramos llorando por las esquinas,
olvidando su empeño.

De los que sembraron
en terreno baldío, y nos alimentaron
con extrema paciencia,
y nos dieron su sangre.

De los que se rompieron
contra nuestro muro;
de los que amamos
y jamás pronunciamos.

De los que nos amaron
y no correspondimos.
Con los que fuimos aves
y nos sobrevivieron,
y, vivimos...
Agradecidos.

De todos los amores
que nos hicieron senda
y, con los que las hicimos.
Agradecidos.


Publicado en el prestigioso portal "La poesía alcanza para todos".


Gracias, lector. 🙏

jueves, 6 de febrero de 2014

NUNCA ES TARDE


Que la vida me despierte temprano,
antes de que el mar me invada
con algún naufragio...

Nunca es tarde

Nunca es tarde
para salir de trampas,
si descubres la puerta,
si te armas
con la llave de tus fuerzas.

Yo nunca tuve ojos;
nunca tuve boca;
ni manos, ni pies.

Mi voluntad eras tú,
caminaba en tus zapatos,
vivía en tu piel.

Y miraba a través de tus ojos
y me perdí en la inmensidad...

Anduve, sí, y no llegué más allá
del porche solitario de mi regazo,
donde los niños jugaban
entre el ciclamor rojo
y las hojas de aquel tilo triste.

Perdimos la clave del portal
de los comienzos,
no fuimos ni dos errantes pasajeros.
Simplemente, no fuimos.

Nada queda de las horas
halladas y perdidas;
se borraron tus huellas y las mías
como se esfuma el perfume
de la breve mañana.

A veces vuelvo la mirada
para recordar tu cara,
tu dulzura silenciosa en mi pelo...
Para sentir aquel preludio
de tus palabras
que nunca fueron versos,
y me alejo...

Me alejo de todos los lugares
donde la luna nos llenó de luces,
donde la noche nos cantó sus miedos.

Te inventé ¡tantas veces!,
después de tanto...
Y me perdí por ti,
y me olvidé de mí.

Equivocada anduve creyéndome reina,
y a veces la princesa que calzaba tu vida.
Yo, que siempre fui descalza...

Aprendí. Y sé que nunca es tarde.
Ahora me veo, me hablo y escucho,
reconozco el tacto de mis manos,
no pertenezco a nadie, soy de mí y del aire...
Me detengo en el ámbar de mis ojos,
miro al frente, la vida me sonríe
esperanzada y su rosa soñadora
tiende un puente ante mis pasos.
🌱🌱🌱

Clarisa Tomás Campa. © All Rights Reserved.

Gracias, lectores. 🙏
Merci beaucoup à tous!